El próximo martes me voy a Nueva York. Sí, por si no lo sabíais, me voy allí de vacaciones, durante 12 días. Sé que os morís de envidia (esperando que sea sana), pero antes de eso dejadme que os diga algo que a lo mejor os hace cambiar de idea.
Ahora mismo, según escribo esto, no dejo de liberar moquillo por mis fosas nasales, parece que me he tragado una pelota de tenis, de lo inflamadas que tengo las amígdalas y el pecho ha sido invadido por el ejército dirigido por Captain Flu. Vamos, que tengo un resfriado del carajo.
En Nueva York, por lo que he visto, las temperaturas van a ser bastante buenas (entre 16 y 20º), así que a ver si eso ayuda a recuperarme. De todas maneras, espero ponerme mejor antes. Al menos, me queda el consuelo de que sólo es un resfriado (teniendo en cuenta que ahora hay epidemia de gripe en Inglaterra).
Bueno, os dejo con esto y ya os pondré al día de mi evolución. De todas maneras, nos vemos por Manhattan.
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