miércoles, 26 de septiembre de 2012

De visita en Dublin


Como ya os comenté en entradas anteriores de este blog, en estos días libres que tengo ahora me iba a Dublín. Pues bien, me fui el pasado domingo por la mañana, y volví anoche, pasando tres días que han sido sencillamente geniales.

Pero bueno, para no liarlo, empezaré desde el principio. El sábado tenía el vuelo (con Ryanair) a las 7 de la mañana, por lo que reservé un taxi para las cuatro de la mañana que me llevó al John Lennon Airport. Al llegar al aeropuerto y pagar al taxista (25 libras), crucé directamente el control policial y tras unos 40 minutos de espera fui a la puerta de embarque. El vuelo salió puntual, y para mi sorpresa, fueron sólo 35 minutos. A pesar de ello, las vistas fueron impresionantes, ya que pude divisar la península de Wirral, con Hoylake y las Hilbre Islands, además de un islote cercano a Dublín denominado Dublin's Eye, y toda la ciudad desde el aire. Aquí tenéis algunas fotografías.




A las 8 y media ya me encontraba en el centro de Dublín, justo al lado de la Spire. La Spire es una aguja gigante que se encuentra en O'Connell Street, una de las avenidas comerciales de Dublín, y aunque no es bonita, es bastante impresionante por su tamaño.

Lo primero que visite, lógicamente por su cercanía, fue O'Connell Street. Aquí tenéis algunas fotos de la avenida en cuestión.




Tras recorrer la avenida, crucé el O'Connell Bridge para visitar el Trinity College. Sencillamente, me encantó. El edificio es precioso, con unos jardines perfectos, y una biblioteca espectacular. Aquí os dejo con algunas fotografías.









Lo que más me gustó, sin duda alguna, fue el libro de Kells y la Old Library. Allí no se podían realizar fotografías, pero gracias a San Google, tengo una para vosotros.


Tras visitar el Trinity College, fui a visitar Merrion Square, una de las plazas del Georgian Quarter de Dublin, y donde se encuentra la casa de Oscar Wilde y una estatua del mismo.




Después de visitar Merrion Square, me entró un hambre atroz, así que decidí ir a desayunar. Me decanté por una cadena de cafés que se llama Insomnia, ya que el desayuno incluyendo cualquier café y un trozo de tarta costaba 3,75. Yo tomé un cappuccino con tarta de zanahoria. Estaba delicioso.


Tras saciar el hambre, me dirigí a St Stephen's Green, el parque más grande del centro de Dublín, y allí me encontré con unos edificios preciosos, además de la casa donde solía vivir el famoso Oliver St John Gogarty. Además, el parque era bastante bonito, con un lago en el centro.





Después, y para descansar un poco, decidí subir Grafton Street, para ir un poco de compras y, sobre todo, entrar a HMV para ver si tenían algún CD interesante. Grafton Street es una calle bastante bonita, llena de tiendas y restaurantes.



Allí, tras entrar a HMV, descubrí que en Irlanda los CDs son bastante más caros que en Inglaterra (alrededor de 17 euros, cuando aquí suelo pagar una media de 5 libras). Al final de Grafton St se encuentra la famosa estatua de Molly Malone.


Tras recorrer Grafton Street, llegué a Dame Street, donde visité el Bank of Ireland, y callejeé por Temple Bar. La zona de Temple Bar me encantó, repleta de pubs puramente irlandeses, llenos de colorido, flores y con música celta.





Tras callejera tranquilamente por Temple Bar, me acerqué a la orilla del Liffey para ver el Half Penny Bridge, para mí el más bonito de los puentes de Dublín.


Después de ver el H' Penny Bridge, visité el Dublin Castle. Es bastante bonito, y aunque no lo visité por dentro, lo que vi me gustó mucho.





Dentro de los muros del castillo se encuentra la Chester Beatty Library, que pese a que es un edificio moderno, tenía una buena exposición de libros y manuscritos antiguos. Sobre todo, me llamó la atención el apartado de manuscritos y libros iluminados asiáticos, y una colección de libros de jade.

Tras visitar la biblioteca, me acerqué a comer. Comí en un restaurante que se llamana Salamanca Fusion, que pese a su nombre español (era un bar de tapas, de hecho), tenían platos con influencia irlandesa, y era bastante barato, sólamente 10 euros el menú del día con bebida y postre.

Yo tomé una ensalada de rúcula con queso feta, croutons y vinagreta balsámica, De segundo, pollo asado a la cerveza Guiness con patatas fritas. Y de postre, sopa fría de frambuesas con albahaca. Todo buenísimo. 

Después de comer, fui a visitar Christ Church Cathedral. La catedral es bastante bonita, y pese a su pequeño tamaño, merece muchísimo la pena.







Tras visitar Christ Church, fuí a visitar la Catedral de St Patrick, pero estaba cerrada hasta una hora después, así que me paseé por los alrededores. Ví la Georges Arcade, una galería comercial cubierta bastante curiosa, y la Iglesia de St Audoen. Después, me acerqué de nuevo a ver St Patricks, que ya estaba abierta.

La catedral es impresionante, muy bonita y realmente merece muchísimo la pena. Además, San Patricio es el patrón de Irlanda, por lo que era una visita imprescindible.







Tras visitar la catedral, me dirigí de vuelta a O'Connell Street, ya que había quedado con Giulia allí. Aproveché para cruzar el H' Penny Bridge, cosa que me encantó.




Llegué a O'Connell Street a las 6 o por ahí, pero Giulia me comentó que se iba a retrasar, por lo que estuve de tiendas durante un buen rato. Debido a que se retrasó más de lo previsto en un primer momento, empezó a anochecer en Dublín, por lo que decidí hacer algunas fotos de Dublín por la noche. El resultado fue éste.




Giulia me recogió a las 9 o por ahí en St Stephen's Green, junto con Nora, Vito y Giulietta. Fuímos a cenar y luego intentamos salir por ahí. Y digo intentamos porque todo estaba cerrado o nos ponían alguna pega. Al final, fuímos a Swords en el coche de Nora, ya que Giulia vive allí, en Swords, y salimos por allí. La verdad es que la noche estuvo bien.

A las 3 o por ahí volvimos a casa de Giulia. Yo dormí en el sofá, como estaba previsto. A la mañana siguiente, pese a que no tenía intención de madrugar mucho, me desperté a las 8 y media y ya no pude dormir más, así que me bajé al centro de Dublín y estuve visitando los museos. Vamos, algunos de los museos, ya que otros estaban cerrados los lunes. 

Además de los museos, visité la National Library. Es un edificio bastante bonito, y la sala de lectura es impresionante, con una cúpula enorme y repleta de libros antiguos.





Después de visitar la National Library, y como llovía muchísimo, me acerqué a varios centros comerciales. Entre ellos, estuve en el Powercourt Townhouse y el St Stephen Shopping Centre. Ambos eran bastante bonitos, y aquí tengo una prueba de ello.





Después, me acerqué a comer a Temple Bar. Comí en Gourmet Burger Kitchen, en Temple Bar Square, una gran hamburguesa con patatas especiadas y un té.


Después de comer, fuí directamente a coger el autobús de vuelta a Swords, ya que Giulia me dijo de ir a casa de Vito a tomar chocolate caliente y luego nos fuimos de karaoke. La noche estuvo bastante divertida, y cantamos todos juntos la gran Bohemian Rhapsody, de Queen.

Ayer, estuve vagueando en casa de Giulia, y luego por la tarde quedamos con el resto de los italianos para tomar un cappuccino. Después de despedirme de ellos, volvimos a casa de Giulia y cogí la mochila y me acompañó a coger la lanzadera al Aeropuerto. 

Al llegar al aeropuerto, la terminal estaba casi vacía, al ser el vuelo tan tarde. Además, en el propio vuelo fuímos unos veinte pasajeros, y duró unos 20 minutos, más o menos. Total, que llegué a Liverpool antes de lo previsto.

A la llegada a Liverpool, descubrí mejor que nunca el tiempo tan bueno (modo irónico activado) que tenemos en esta ciudad. Llovía, hacía muchísimo frío y mucho viento (para variar).

El caso es que hoy estoy en casa, vagueando un poco porque trabajo esta noche. Espero que la noche no se me haga muy larga.